El Inter de Miami de Messi protagonizó un auténtico festival goleador en su visita a Hong Kong, imponiéndose por un contundente 1-4 a la selección local en un partido que despertó una enorme expectación.
El césped del estadio de Hong Kong lucía espléndido para la ocasión, con sus característicos trazos verdes brillando bajo el sol del mediodía. Las gradas repletas de aficionados daban fe del interés que había levantado el partido, con las 40 mil entradas agotadas desde hacía semanas.
Messi y Suárez se quedaron en el banquillo todo el juego
Sin embargo, muchos de esos seguidores acabaron decepcionados al comprobar que las dos grandes estrellas del Inter, Leo Messi y Luis Suárez, se quedaron en el banquillo durante todo el encuentro.
Aun así, el equipo estadounidense ofreció un gran espectáculo sobre el césped, especialmente en la segunda parte.
Así fue el primer triunfo del Inter Miami en pretemporada
El Inter saltó al terreno de juego consciente de la importancia de lograr una victoria después de encadenar varios tropiezos en esta pretemporada. Necesitaban enderezar el rumbo antes del inicio de la MLS. Y los de Miami encontraron pronto el premio a su ambición ofensiva cuando Robert Taylor adelantó a los suyos con un preciso disparo desde fuera del área.
Sin embargo, el combinado local no tardó en replicar. Justo antes del descanso, Anier aprovechó un error del argentino Avilés para empatar la contienda e irse al vestuario con tablas en el marcador.
Fue tras el paso por los vestuarios cuando el Inter de Miami desató definitivamente su calidad. En apenas cinco minutos, entre el 50 y el 55, los americanos sentenciaron el partido con dos nuevos tantos. El primero llegó en una jugada de estrategia, con Lawson Sunderland rematando a placer un saque de esquina. Poco después, el ecuatoriano Campana amplió distancias con un potente zurdazo dentro del área.
Con el 1-3, el técnico Martino dio entrada a dos de sus estrellas, Busquets y Jordi Alba. El lateral catalán estuvo a punto de hacer el cuarto al poco de saltar al campo, pero su disparo lo despejó la zaga local. Quien no falló fue Sailor, sentenciando la goleada a cinco minutos del final con un preciso testarazo.
El Inter de Miami se marcha así de Hong Kong con una victoria balsámica, la primera en lo que va de preparación. Un triunfo para coger confianza antes del inicio de la temporada en la liga norteamericana. Eso sí, muchos aficionados abandonaron el estadio con cierta decepción al no haber podido ver sobre el césped a sus ídolos Messi y Suárez. Tendrán que esperar al inicio de la MLS para disfrutar de sus estrellas.